Adios Argentina, aunque este en su propio país,con sus dirigentes prepotentes, estrellas sobrevaloradas y astros eclipsados por sus propios miedos, la selección argentina esta fuera gracias a unos heroicos uruguayos y un entrenador con mucha confianza en su equipo, si ese es Tavarez.
Crónica de una muerte anunciada… por Batista. Así es, la Argentina fracasó en su intento por ganar la Copa América como local, con su público, con sus estrellas, con su cuadro imponenete, y potente, con el mejor jugador del mundo, Messi. Hoy en los cuartos de final, se plantó el Uruguay semifinalista de la última Copa del Mundo, el equipo de Tavarez, quien por cierto le ha dado hoy una lección a Batista de cómo se juega con la ventaja en lo mental, y con la desventaja de un hombre menos desde el primer tiempo, cuando Pérez el autor del gol salió expulsado por una rigorista segunda tarjeta amarilla. Aún así a los argentinos les siguió faltando ese jugador de medio campo que nunca tuvieron, y que siempre quiseron suplir con el juego individual, desde Messi y Tevez pasando por Agüero hasta Di María.
Hoy Argentina confirmó que no tiene defensa, que a Forlan y a Suárez los van a soñar 4 años, y que Muslera es una garantía de cara a una final que parece más que nunca alcanzable. Messi brilló por espacios del partido como el pase para el gol de Higuain, pero no había un sistema que permitiera ni su lucimeinto individual, ni que su posición en el campo le diera a sus compañeros ventajas importantes, inlcuso tuvo en sus pies una última al final del segundo tiempo extra. Batista debe irse, pues demostró que no puede con este grupo de talentos individuales de clase mndial para formar un gran equipo, hoy con dignidad lo debe aceptar y hacerse a un lado, finalmente el hecho de que Tevez haya fallado el penal decisivo es solo ya, anecdótico.
Uruguay hoy regó el rectángulo verde de Santa Fe, con garra, pero sobre todo con la inteligencia de saber jugar un partido importante y resolverlo así, a lo grande en 5 penales perfectos.
“Desde el rectángulo verde… en Santa Fe, Argentina. Hasta la próxima”
Arturo Cevallos