Las aguilas del America volaron desde lejos, para encontrar a la perrera mas grande de México y una fiereza que no imaginaban.
Antonio Mohamed y el Piojo Herrera se veriande nuevo las caras, aquellos que fueron compañeros como jugadores en los historicamente divertidos Toros Neza.
El juego inicio y el color rojo pinto a los locales y a dos de sus jugadores con tarjetas escarlata. Las aguilas del America se fueron arriba en el marcador con un contragolpe de Benitez el cual dio pase y habilito para el segundo gol en Primera División, de Raúl Jiménez al minuto 62; pero el colombiano Duvier Riascos, logró el empate un minuto después al 63, para que los líquidos volaran en las tribunas del estadio caliente como ya es costumbre, y ver un festejo a lo gusano Napoles del jugador de Xolos.
Este partido sirvió para que muchos afificonados americanistas o no, se dieran cuenta que los números de las aguilas son frios y no muestran la realidad en la cancha, ni son espectaculares ni esta tarde/noche fueron efectivos. El America estuvo con un hombre de más desde el minuto seis y con dos más a partir del 73. Lo que nos deja otra enseñanza,que a pesar del empate los Xolos tuvieron un partido memorable y digno de aplaudir por la afición local,eso a la larga les dará mas frutos que los triunfos morales que esta cosechando.
Al final fue el mismo marcador que en el estadio azteca, un empate a un solo gol por bando,pero que dejo con un mejor sabor de boca a los perros aztecas.