Los Xolos de Tijuana tienen el Factor “X”

El impacto mediático que han generado los Xolos de Tijuana, desde su ascenso a la Primera División de México, es un fenómeno que no se puede perder de vista, y al que habrá que darle seguimiento en el próximo año, ahora que el club aseguró su permanencia en la máxima categoría del balompié azteca.

Tijuana tiene de por sí en su nombre la atención asegurada: ciudad tradicionalmente de perdición para los estadounidenses que cruzaban la frontera para romper las normas que en su país no se les permite romper; ciudad reconocida a nivel internacional por la cuestión de la violencia generada por el narcotráfico, pero que aunque sea de esta forma, siempre está presente en la mente de cualquier habitante del planeta, sea con buenos o malos ojos. El nombre “Tijuana” ahí está.

Después de tener seguro su lugar en la memoria colectiva, los Xoloitzcuintles de Caliente tienen otro factor que los diferencia de casi todos los demás clubes de Primera División: al igual que las Chivas del Guadalajara, cuentan con una cancha de pasto sintético, que nunca dejará de ser tema en los rivales que visiten la ciudad fronteriza en busca de llevarse los tres puntos.

De la mano de la cancha, viene el estadio, que ha contado con llenos totales desde que el club ascendió a Primera, y en el que incluso ya hay planes para una expansión.

Finalmente, la mascota: si el Xolo Mayor no basta para hacerse un hueco en la memoria colectiva, lo que no tiene pierde es la presencia de un verdadero perro de esta raza mexicana para darnos cuenta de que equipo es distinto a los otros 17 del máximo circuito, en la que probablemente sea la sede más extraña para un equipo de futbol profesional.

Bajo estos argumentos, la directiva de los Xolos tiene todo lo necesario para convertir a su club en un fenómeno aún mayor, de cara a la próxima temporada. Lograr o no un contrato formal para que Nike diseñe el uniforme del equipo, o seguir el modelo actual que ha despertado gran interés entre los aficionados de todos los clubes (pues, admitámoslo, su par de uniformes actuales fueron probablemente los más atractivos de la temporada que termina); aprovechar aún más la “bizarra” imagen de este equipo para ganar seguidores nuevos o llegar a simpatizar con más fanáticos de otros equipos mexicanos, que están convirtiendo a Xolos en un club que les gusta.

Gracias a este Factor “X”, habrá que seguir muy de cerca lo que haga Xolos a nivel de mercadotecnia para la próxima temporada. En nuestro futbol nunca sabemos qué pasará con las más recientes incorporaciones a la Primera División, pero por lo que ha generado y puede seguir generando, espero que Tijuana quede por mucho tiempo como una plaza de la máxima categoría.